Actividades:
Prácticas del lenguaje
Alumno:
Grado : 5°
Buscá el cuento : “La guerra de los yacarés” de Horacio Quiroga , en la web ,pedilo por
mail a biblioteca5de10@gmail.com O DESCARGALO HACIENDO CLICK AQUÍ
Preguntas de La
guerra de los yacarés
1. ¿Dónde viven los
yacarés?
2. ¿Han visto a los
hombres antes?
3. ¿Qué comen?
4. ¿Qué cree el viejo
yacaré que es el sonido extraño?
5. ¿Qué es el sonido en realidad?
6. ¿Por qué dice el viejo
que van a morir?
7. ¿El vapor regresa el
próximo día?
8. ¿Qué deciden hacer los
yacarés para parar los vapores?
Preguntas de Yacarés#2
1. ¿Qué
pasa cuando el buque de los hombres se enfrenta con el dique?
2. ¿Cómo
termina el argumento entre los hombres y los yacarés; qué se dicen al final?
3. ¿Qué
tipo de barco traen los hombres el próximo día?
4. ¿Qué
hace este nuevo barco?
5. ¿Qué
deciden hacer los yacarés entonces?
6. ¿Qué
hacen los hombres entonces?
7. ¿Cómo
es diferente el arma que usan los hombres esta vez?
Preguntas de Yacarés #3
1. ¿A
quién deciden visitar los yacarés para ayuda?
2. ¿Por
qué lo quieren visitar?
3. ¿Por
qué está enojado este personaje con los yacarés?
4. ¿Qué
número de dique construyen los hombres?
5. ¿Cómo
termina la última batalla?
6. ¿A
quién come el viejo yacaré?
7. ¿Cómo
termina el cuento?
Actividades prácticas del lenguaje
Nombre:
Grado:
1. Leé atentamente el
texto y luego respondé las actividades propuestas.
LA COSA MÁS INCREÍBLE
Hans Christian Andersen
Había una vez un rey
que prometió que el hombre que hiciera la cosa más increíble se casaría con su
hija, la princesa más increíble, y sería dueño de la mitad del reino.
Desesperados por sentarse sobre montañas de monedas de oro, todos los solteros,
jóvenes y viejos, pusieron a prueba su ingenio: alguno tomó chocolate caliente
con torta de crema hasta reventar y cientos ensayaron cómo escupírsela espalda
pensando que era lo más increíble que podían hacer. Pero esas no eran formas de
ganarse a una princesa. Para decidir quién merecía el premio, el rey organizó
un concurso loquísimo. Hubo un interminable desfile de objetos y destrezas, uno
más ridículo que el otro, pero todos coincidieron que lo más increíble había
sido un reloj gigantesco que anunciaba la hora por medio de unas figuras
vivientes tan perfectas que parecían personas. Así, Moisés, Adán y Eva, los
tres Reyes Magos, los cuatro puntos cardinales, los cinco sentidos, un jugador
de dados, los siete días de la semana, ocho monjes, las nueve musas, de nuevo
Moisés, unos angelitos bailarines y un robusto sereno anunciaban, una tras otra
tic- tac-tic-tac, las doce horas del reloj. - ¡Esta sí es la cosa más
increíble!- decía la gente-. Pero ¿quién había fabricado una maravilla tan
maravillosa? Para sorpresa de todos, el creador del reloj era un joven
artesano, alegre y de buen corazón, a quien todo el pueblo conocía y quería. El
jurado no había dado su veredicto, pero ya todos sabían cuál era la cosa más
increíble que habían visto. Así que, mientras se preparaban los festejos, el
joven artesano esperaba feliz como una lombriz el momento en que se anunciaría
su boda con la princesa. De pronto, un hombre alto y huesudo, de larga barba y
cara de gruñón, se abrió paso a los codazos entre la multitud. - ¡Ahora van a
ver, pelafustanes! –dijo, y partió el reloj al medio con un feroz hachazo.
Saltaron engranajes, resortes y pedazos de madera hacia todas partes, y el
pueblo enmudeció- ¡Nada puede ser más increíble que romper este reloj! ¡Ja ja
ja ja ja!
A la princesa no le
hizo ninguna gracia, porque el artesano le había gustado mucho más que ese
gruñón que andaba por ahí con un hacha encima, pero el jurado no tuvo más
remedio que declararlo ganador y concederle la mano de la princesa y la mitad
del reino, porque una promesa es una promesa, incluso si es de lo más
increíble. La boda se anunció con trompetas trompetísimas y todo el pueblo
corrió como loco a conseguir una buena ubicación para ver de cerca de los novios.
El rey había ordenado que la iglesia fuera decorada con miles de velas porque
una princesa no se casa todos los días; había tanta luz, que mucha gente
entrecerró los ojos para ver lo que pasaba. Mientras las doncellas y los
caballeros acompañaban a los novios hasta el altar, todo quedó en silencio para
el comienzo de la ceremonia. Fue entonces, cuando podía escucharse el sonido de
una araña castaña tejiendo su red, que la puerta de la iglesia se abrió de
golpe y, para asombro de todos, el maravilloso reloj del artesano, entero como
si nada le hubiera pasado, avanzó enojado por el pasillo de la iglesia y se
plantó como un florero delante del novio. De pronto el reloj comenzó a dar
enloquecidamente las horas, una tras otra tic-tac-tic- tac. Y, una tras otra,
las figuras salieron para reprocharle al novio, quien miraba con cara de nada,
el hachazo que les había dado. El último en salir fue el sereno, pero esta vez
traía una sorpresa en la mano. - ¡A dormir, zapatón! –dijo, y le pegó al novio
un garrotazo en la cabeza-. ¡Para que aprendas! ¡Y ahora nos vamos! Como por
arte de magia, el reloj se esfumó y las velas se convirtieron en flores, y el
órgano comenzó a tocar solo, y todos supieron que aquello era la experiencia
más increíble que habían tenido jamás. - ¡Que venga el artesano, el verdadero
ganador! ¡Que sea mi esposo! –dijo la princesa, que estaba lindísima con su
vestido blanco. Y así fue que se casaron, y todos se alegraron y felicitaron al
artesano, y nadie, ni uno solo, se puso
celoso. Y eso fue lo más increíble de todo.
FIN
2. Respondé:
a. ¿Qué tenía de
increíble el reloj fabricado por el joven artesano?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................…………………………………………………………………………………………… ……..............................................………………………………………………………………………
…………………………..............................................…………………………………………………
b. ¿Qué pretende el
hombre gruñón? ¿Cómo lo hace?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................……………………………………………………………………………………………
……..............................................………………………………………………………………………..
…………………………..............................................…………………………………………………..
c. ¿Cuál es el
veredicto del jurado ante tal actitud?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................……………………………………………………………………………………………
……..............................................………………………………………………………………………..
…………………………..............................................…………………………………………………..
d. ¿Cómo reacciona la
princesa?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................…………………………………………………………………………………………… ……..............................................………………………………………………………………………
…………………………..............................................…………………………………………………
e. ¿Cuál es la venganza
del reloj?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................……………………………………………………………………………………………
……..............................................………………………………………………………………………..
.…………………………..............................................………………………………………………….
f. ¿Cómo reacciona la
princesa ante la venganza del reloj? ¿Y el pueblo?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................……………………………………………………………………………………………
……..............................................………………………………………………………………………..
…………………………..............................................…………………………………………………..
3. Reescribí las
siguientes oraciones reemplazando las palabras destacadas por un sinónimo.
- El creador del reloj
era un joven alegre
y de buen corazón.
…………………………………………………………………………………………..............................
- El rey
organizó un concurso raro.
…………………………………………………………………………………………..............................
- Avanzó enojado
por el pasillo.
…………………………………………………………………………………………..............................
4. Extraé del texto los
antónimos de los siguientes términos:
arreglar:
………………………………….. ruido:
……………………………………………
viejos:
……………………………………. casados:
…………………………………………
triste:……………………………………..
falso: ……………………………………………
5. Subrayá en el cuento
3 sustantivos propios con rojo, 3 sustantivos comunes con azul y un adjetivo
calificativo con verde.
6. Escribí la renarración del cuento “La cosa
más increíble”.
Cuando termines, no
olvides revisar: - que hayas contado los hechos más importantes, sin detalles
innecesarios. - que la información esté clara y completa para que se
entienda. - que esté presente el inicio,
el conflicto y el desenlace. - que no haya palabras repetidas innecesariamente.
- que todas las oraciones empiecen con mayúscula y terminen en un punto. - que
hayas organizado las oraciones en párrafos. - la ortografía.
¡UN NUEVO CUENTO PARA
LEER!
1. Leé atentamente el
texto y luego respondé las actividades propuestas
Perdido en la selva de
Ricardo Mariño
Antes de dar a conocer
su libro Supervivencia en la selva, el profesor Winston Trabagliati quiso
comprobar que los consejos incluidos en ese volumen realmente fueran útiles
para personas en peligro. "Alguien debería internarse en el Amazonas sin
otro recurso que mi libro", le había dicho a su editor. En la editorial
decidieron que la persona indicada para esa prueba era el joven cadete Catalino
Esmit. Así, una tarde Catalino fue
invitado a dar una vuelta en avioneta. Piloteaba el avión el tesorero de la editorial
y atrás iban Winston Trabagliati, Catalino y el editor. Antes de que el avión
tomara altura los dos hombres le dijeron a Catalino que por ser tan joven
correspondía que él se pusiera el único paracaídas que había en el avión.
Catalino les agradeció. Pasadas unas horas, al sobrevolar el mismísimo corazón
del Amazonas, el editor abrió la puerta de la avioneta y le dijo a Catalino que
no se perdiera la incomparable vista que se apreciaba desde allí. Cuando el
joven se asomó, Winston Trabagliati le pegó en el pecho con su libro y le dijo:
-¡Te regalo mi último trabajo, Catalino! ¡No dejes de leerlo! Al tratar de
agarrar el libro, el muchacho soltó el caño al que estaba aferrado. Por un
segundo hizo equilibrio sobre la base de la puerta, pero Trabagliati le dio
unas cariñosas palmadas en la espalda: -Estoy seguro de que te gustará, hijo. Y
te será de gran utilidad.- Catalino salió al vacío dando inútiles manotazos y
patadas. Segundos después el joven cadete miró hacia abajo y recordó que tenía
puesto un paracaídas.
- Dentro de todo es una
desgracia con suerte -se dijo-. Justo vengo a caer yo, el único que llevaba
paracaídas gracias a la generosidad del señor editor y de Winston Trabagliati,
el genial escritor, que casi me obligaron a que me pusiera el único que había.
Ni quiero pensar qué hubiera ocurrido si caía uno de ellos. De pronto Catalino
sintió que algo tiraba de él hacia arriba: era el paracaídas que se había
abierto. Segundos después volvió a tener la misma sensación: era que el
paracaídas se había enganchado en las ramas más altas de un árbol
increíblemente alto. Para sacarse el paracaídas Catalino debió esforzarse
porque estaba sobre una rama muy delgada. Luego, resbaló tomado de las manos,
desplazándose hacia el tronco del árbol. Allí descansó unos diez minutos porque
se había quedado sin fuerzas. -Yo acá descansando y ellos, allá en el avión.
Pobres, seguro que están preocupadísimos... pensó en voz alta-. Pero... ¡qué
afortunado! -exclamó al reconocer el libro de Trabagliati enganchado en una rama
apenas a unos metros de él-, justo vengo a caer en la selva con un libro que
trata sobre cómo sobrevivir en la selva. Y hasta debe de tener un capítulo
dedicado a cómo descender de un árbol. Justamente, en el índice estaba señalada
la parte del libro dedicada a ese problema. Catalino buscó presurosamente esa
página, pero antes de llegar a leerla apareció un gorila. Era un gorila negro y
peludo con dientes blancos y enormes como fichas de dominó. La bestia se
descolgó hábilmente de una rama, caminó por otra y en un instante estuvo al
lado de Catalino. El joven abrió grandes los ojos, pero enseguida los desvió
hacia el índice del libro, esta vez en "Simios del Amazonas, especies,
características, alimentación y trato con el hombre". Desgraciadamente
Catalino no llegó a completar el título de ese capítulo. El animal le arrebató
el libro de un manotazo y luego, al morderlo, perdió un diente. Furioso, agarró
a Catalino, le metió el libro en la boca y como si fuera una pelota lo arrojó
al vacío. El joven cayó a un río infestado de cocodrilos. Mientras flotaba,
buscó en el índice "Técnicas de defensa ante cocodrilos". Pero en la
página indicada figuraba "Insectos amazónicos comestibles". Un error
de edición. El señor editor siempre se quejaba de ese tipo de errores diciendo:
"Les pago para que detecten estas cosas y sin embargo...".
-Qué lástima -pensó
Catalino -. Una edición tan cuidada y buena, con dibujos tan bonitos, tiene
este error en el índice. Sus pensamientos fueron interrumpidos por tres enormes
cocodrilos que lo rodearon con sus descomunales bocas abiertas. Catalino debió
abrirse paso dándoles librazos en las trompas. Llegó extenuado a la orilla,
pero allí fue atrapado por un grupo de indígenas salvajes. Los salvajes estaban
por cocinarlo, cuando el brujo hojeó el libro y se le ocurrió que Catalino
podría leerles un fragmento a él y a sus compañeros antes de ser cocinado. El
joven aceptó gustoso. "Si Winston Trabagliati viera esto, no podría
creerlo", pensó, mientras abría el libro en "El problema del agua
potable. Métodos sencillos para sanear aguas contaminadas". Los indios
escucharon atentos. ¡El agua potable era la que se podía tomar! ¡La otra, la
que no es potable, podía hacer que a todos los hombres de la tribu les diera
dolor de barriga! Encabezados por el brujo y el cacique, trataron de seguir las
instrucciones para obtener agua potable, pero ninguno logró extraer ni una gota
machacando hierbas como indicaba el libro de Winston Trabagliati. Pasada una
hora, los indios se miraban entre sí preocupados. Todos lo miraron furiosos a
Catalino. -¿Y si beben agua del río? -se le ocurrió preguntar a Catalino. Los
indios se acercaron al río con gran reserva (prudencia). Uno de ellos mojó sus
dedos en el agua y la probó, atemorizado. -Parece buena -dijo al fin. Otros
indios también bebieron un poco y confirmaron lo dicho. -¡Es agua potable!
-anunció a gritos el brujo. Catalino fue felicitado y levantado en andas. Hasta
que uno de los indios recordó que, desde hacía quinientos años, quizá más, la
tribu tomaba agua de ese río. El joven fue perseguido por los indios hasta la
noche. Al fin se ocultó sobre una palmera, comió un coco y se mantuvo despierto
para espantar con el libro a las alimañas e insectos llenos de aguijones,
pinzas y bolsitas de venenos, que desde todos los ángulos trataban de
perforarlo.
A la mañana siguiente
saltó sobre un tronco y se dejó llevar río abajo. Favorecido por la
incontenible corriente y las increíbles cascadas que por momentos lo hacían
volar sobre las aguas, llegó un día después a un puerto. Pero al parecer
alguien había avisado que un joven se había perdido en la selva y luego un
helicóptero lo había avistado cuando lo arrastraba el agua, así que mucha gente
lo esperaba en el puerto. Entre la muchedumbre se distinguían el mismísimo
Winston Trabagliati y el editor, además de varias cámaras de televisión. La
imagen del joven emergiendo de las aguas con el libro “Supervivencia en la
selva” bajo el brazo fue vista en todo el mundo. El lanzamiento del libro fue
un gran éxito y ahora nadie se atreve a viajar a zonas selváticas sin llevar un
ejemplar. Y Winston Trabagliati, el genial escritor, ya está trabajando en un
volumen que se titulará Guía para sobrevivir en el Polo Sur.
2. ¿Cuántas oraciones
tiene el primer párrafo? Encerrá a cada una entre paréntesis ( ). ¿Cómo las
identificaste?
…………………………………………………………………………………………………....................
..........................……………………………………………………………………………………………
……..............................................……………………………………………………………………….
3. ESTÁ EN EL TEXTO
¿Dónde está perdido el
protagonista?
……………………………………………………………………………….........................................
……………………………………………………………………………………………………………..
¿Cómo llega el protagonista
a ese lugar? ………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………..
4. PASO A PASO
¿En qué orden aparecen
estos personajes? Enumeralos.
indígenas
cocodrilos
Catalino
gorila
editor
Winston Trabagliati
periodistas
5. PALABRAS Y MÁS
PALABRAS
Elegí los dos adjetivos
más apropiados para describir a Catalino. Marcalos.
desconfiado
crédulo
confiado
escéptico
¡Podés ayudarte con el
diccionario!
6. ANALIZANDO EL TEXTO
“Yo acá descansando y
ellos, allá en el avión. Pobres, seguro que están preocupadísimos... -pensó en
voz alta-. Pero... ¡qué afortunado! -exclamó al reconocer el libro de
Trabagliati enganchado en una rama apenas a unos metros de él-, justo vengo a
caer en la selva con un libro que trata sobre cómo sobrevivir en la selva! Y
hasta debe de tener un capítulo dedicado a cómo descender de un árbol.”
a. ¿Qué personaje habla
consigo mismo en esta parte del cuento?
………………………………………………………………………………………………………………..
b. ¿A quiénes se
refiere cuando dice “ellos”?
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
7. ¡A SEGUIR LAS
PISTAS! NO ESTÁ ESCRITO EN EL TEXTO.
Respondé las siguientes
preguntas. Recordá que debés justificar tus respuestas, es decir, explicar con
situaciones o acontecimientos del cuento el porqué de tu opinión.
a. ¿Te parece que fue
una casualidad que Catalino tuviera puesto el paracaídas cuando cayó del avión?
………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………….
………………………………………………………………………………………………………………..
b. ¿Cómo creés que se
comportaron el profesor y el editor con Catalino? ……………………………………………………………………………………………………………… ……………………………………………………………………………………………………………….
………………………………………………………………………………………………………………..
c. ¿Es cierto que el
libro del profesor ayudó a Catalino a sobrevivir en la selva?
………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………….
………………………………………………………………………………………………………………..
8. El profesor Trabagliati tuvo un problema.
Algunas palabras se le mezclaron y están ubicadas en las columnas erróneas.
a. Marcá con un color
las palabras intrusas de cada columna.
b. Indicá si las palabras
sobrantes son agudas, graves o esdrújulas. Explicá cómo te diste cuenta.
profesor- preocupadísimos - árbol- indígenas- libro - selva- editorial -árboles - escritor- avión - río -regaló
corazón - páginas - gritaba- índice- capítulos -gorila
9. Describí a Catalino Esmit utilizando siete
adjetivos del recuadro. Podés ayudarte con las siguientes recomendaciones:
- Utilizá sinónimos
para no repetir palabras. - Las oraciones de la descripción deben ser completas
ya que es importante que se entienda el texto.
- Las oraciones tienen que comenzar con mayúscula y terminar con
punto. - Ojo con los tiempos verbales
que uses. Acordate que al comenzar el
presente debés seguir en ese mismo tiempo.
- Describí el lugar en el cual se encuentra el personaje y utilizá
comparaciones.
responsable -
joven – valiente – perseverante – amable – malhumorado – débil – ingenuo
– sensible - débil – ambicioso- engreído
– odioso – desconfiado - inteligente
Leé el siguiente cuento
y, ¡a trabajar!
DIENTES Ema Wolf
Boris Dracul trabajaba
de vampiro. Todas las noches se ponía
su capa de seda negra- tenía otra de hule impermeable para los inviernos
húmedos- y se largaba a vampirear por los caminos de Moldavia. No es fácil ser vampiro en un pueblo de
campesinos que se acuestan más temprano que las gallinas. Al menos no lo era
para el conde Dracul, incapaz de atravesar paredes, de cruzar volando las
ventanas convertido en murciélago y de toda otra acrobacia parecida. Dracul tenía que conformarse con morder el
pescuezo de algún enamorado tardío o de un aldeano insomne que estuviera fuera
a esa hora paseando el perro. Para colmo, los habitantes del pueblo vivían de
la cosecha del ajo, y quien más quien menos siempre andaba con un diente en el
bolsillo. El conde Dracul vivía, claro,
en un castillo tenebroso. Durante el
día dormía en la bañadera. (Créase o no, las bañaderas suelen ser los lugares
más secos en esos viejos edificios.) Durante la noche…. La noche alentaba sus
peores propósitos. ¿Quién ha visto
alguna vez el despertar de un vampiro?
Cuando el cucú daba las doce se levantaba de un salto. Solía darse la
nuca contra las canillas, pero eso jamás lo desmoralizó. Con los ojos todavía
enlagañados se peinaba – de memoria, porque los vampiros no se reflejan en los
espejos- y manoteaba la capa que colgaba del toallero. Después se deslizaba por
el ventiluz del baño hasta el jardín. El rocío lo despabilaba ferozmente. ¡Y a
comer! Una noche de ésas, una tormenta
maligna sacudía los muros del castillo. Afuera aullaban los lobos, las
lechuzas, los hurones y animales varios. A pesar del vendaval, el conde Dracul
se aprestaba a salir. Como siempre, se deslizó a través del ventiluz y marchó
hacia el pueblo. En las calles de la
aldea, naturalmente, no había un alma. Con semejante tiempo había menos que
nadie. Dracul pisó varias baldosas
flojas y maldijo en rumano. La panza le crujía y él ya imaginaba una
desgraciada noche de ayuno. ¡De
pronto….! Pasos que se acercaban. Suspenso. - Scruich, scruich – hacían los
pasos mojados.
Dracula tensó todos los músculos del
cuerpo. Observó que una sombre se
acercaba por la vereda. Miró bien. Por el rodete, parecía una señora. Parecía
no, era una señora. Dracul se agazapó
detrás de un buzón y esperó a que la dama se acercara, listo para dar el gran
salto. Más suspenso. Cuando la tuvo cerca, salió de su escondite,
desplegó la capa y abrió la boca con un rugido exhibiendo los colmillos. La señora clavó los ojos en esa bocaza que
tenía a veinte centímetros de su cara y lanzó un grito espantoso: -
¡AAAAAAAAHHHH! ¡QUÉ HORROR! Lo que pasó
después nadie pudo imaginarlo, ni siquiera el mismísimo conde. La mujer lo zamarreó por el cogote con unas
manos robustas de sifonero y después lo derribó con un golpe de karateca. ¿Con quién se había topado el conde Dracul?
¡¿Quién era ella?! Era nada menos que
la temible doctora Carramela, la dentista ortodoncista de la aldea. ¡El terror de
las Caries! ¡El azote de los Dientes Desubicados! El conde sintió que lo levantaban por el
aire y cerró los ojos. En pocos minutos
se encontró sentado en el sillón de la dentista con la boca abierta. Las
rodillas de la Carramela, apoyadas sobre el pecho, le trababan los movimientos.
Estaba furiosa. - ¡Qué barbaridad! –
decía-. ¡Esto está a la miseria! ¿Cuándo aprenderán a cuidarse la boca?
¡PUERCO, PUERCO, PUERCO! En un rato le
emparejó los colmillos, le arregló seis muelas picadas, le sacó dos dientes que
le sobraban y le hizo un tratamiento de flúor. Después lo fletó para su casa,
no sin antes darle un sermón y prohibirle para siempre los merengues. Nunca más anduvo el conde Dracul vampireando
solo de noche por los caminos de Moldavia. Es una pena. Desde entonces guarda su cepillo de dientes
en un vaso, junto al tubo de pasta, al lado de la jabonera. Ema Wolf
1. Con la ayuda del texto, escribí el
significado de cada una de las siguientes palabras. Luego, buscá la definición
en el diccionario y copiala.
Hule:
¿Qué pensás que
significa?: …………………………………………………………………………….
Definición del
diccionario: ………………………………………………………………………………..
Pescuezo:
¿Qué pensás que
significa?: …………………………………………………………………………….
Definición del
diccionario: ………………………………………………………………………………..
Desmoralizarse:
¿Qué pensás que
significa? : …………………………………………………………………………….
Definición del
diccionario: ………………………………………………………………………………...
Despabilarse:
¿Qué pensás que
significa?: ……………………………………………………………………………..
Definición del
diccionario: ………………………………………………………………………………...
Zamarrear:
¿Qué pienso que
significa?: ……………………………………………………………………………...
Definición del diccionario:
………………………………………………………………………………..
2. Ordená la secuencia narrativa según
sucedieron los hechos.
Vio una mujer caminando y muy decidido
fue a atacarla.
La dentista le prohibió a Dracul comer
merengues y lo mandó a su casa.
Una noche tormentosa, Dracul salió en
busca de víctimas.
Boris Dracul era un conde que trabajaba
de vampiro. Vivía en un castillo y por las noches salía a vampirear. Dracul quedó tan asustado que nunca
más salió a vampirear. Aunque sí empezó a cepillarse mucho los dientes.
La mujer se asustó mucho.
Como la mujer era dentista, llevó a
Dracul a su consultorio y le arregló los dientes.
3. Vincula cada hecho con la CAUSA que te
parezca más razonable para explicarlo.
Hecho Causa que lo
produce
Una de las noches en la
que Dracul salió a vampirear, había muy poca gente en la calle.
Había muy poca gente en
la calle porque se desató una fuerte tormenta.
Cuando la fue a atacar,
la dentista se asustó al ver a Dracul.
A Dracul le costaba demasiado ser un vampiro
normal.
Dracul, finalmente comenzó a preocuparse por
su dentadura.
.
4. Realizá las siguientes actividades:
a. Subrayá con negro en el texto los dos
personajes más importantes (una vez cada uno).
b. ¿En dónde vivía Dracul? Circulalo en el
cuento.
c. ¿De qué trabajaba Dracul? ¿En qué momento
hacía su trabajo?
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
d. Nombrá las dos razones por las que no era
fácil ser vampiro en Moldavia.
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
e. ¿Qué imaginaba Dracul mientras caminaba por
la calle la noche de la tormenta antes de encontrarse con la señora? ¿Por qué
pensaba eso?
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
f. Al ver al Conde Dracul, la doctora gritó:
“¡AAAAHHH! ¡Qué horror! ¿Por qué gritó la doctora?
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
g. Cuando se encontraron Dracul y Carramela,
¿quién creés que se asustó más? Justificá tu respuesta.
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
5. Leé el fragmento: “Dracul pisó varias
baldosas flojas y maldijo en rumano. La panza le crujía y él ya imaginaba una
desgraciada noche de ayuno.”
a. Un adjetivo
gentilicio. b. Escribí el sustantivo propio del que proviene el gentilicio. c.
Subrayá todos los adjetivos que modifican el sustantivo “baldosas”. d. Subrayá
cuatro verbos.
Leé el siguiente cuento.
El mensajero de Ricardo
Mariño
Era un joven mensajero
del rey, llamado Teobaldo, que para hacer su trabajo cruzaba ríos y montañas y
esquivaba toda clase de
peligros con mucha valentía. Pero Teobaldo no era una persona de verdad, era un
personaje. Más precisamente,
era un personaje del primero de los cuentos de un libro que en total tenía
cinco.
El libro pertenecía a
un chico que todas las noches leía en voz alta el último cuento, llamado “El
canto de
la princesa”. Aunque
tenía un final triste, ese cuento era su preferido.
Al principio a Teobaldo
le dio celos que el chico prefiriera ese cuento y no el suyo, pero con el
tiempo
prestó atención a la
princesa y terminó enamorándose de ella.
“El canto de la
princesa” empezaba justo cuando la joven princesa Mirna, quien tenía una
belleza
deslumbrante, era
raptada por un malvado hombre de palacio. El malhechor encerraba a Mirna en la
profundidad
de una cueva, bajo la
vigilancia de un dragón de dos cabezas. El único consuelo de la joven en aquel
terrible lugar
era cantar.
Cuando por fin los
hombres del rey apresaron al raptor, abatieron al dragón y entraron en la
cueva. No
encontraron a la
princesa Mirna sino a un bello pájaro blanco que echó a volar. Desde entonces
el tristísimo canto
de aquel pájaro se
escuchó en todo el reino.
Teobaldo estaba
enamorado de Mirna y enojado con el final de esa historia. Cada nueva oportunidad
en
que el chico volvía a
leer ese cuento, Teobaldo se enamoraba más y más de la princesa y más se
entristecía al
escuchar el desenlace
(el final).
De modo que un día
partió hacia el último cuento del libro para intervenir en él e impedir que la
chica se
convirtiera en pájaro.
Para llegar a “El canto de la princesa” tenía por delante setenta páginas y
quién sabe
cuántos peligros.
Pasó delante de la
página quince y poco después entró en el segundo cuento. Allí encontró a un
viejo
mago, enojado porque en
el circo lo habían reemplazado por un mago más joven.
- Al final de este
libro hay un cuento que termina mal – le contó Teobaldo -. Voy para allí a
cambiar el
final.
- No estoy de acuerdo
con los finales tristes – le respondió el mago -. Te acompaño.
Teobaldo y el mago
llegaron al tercer cuento, que eran de unos animales que se la pasaban
charlando. Allí
había un león que
estaba aburrido de que en su cuento nunca pasara nada y, con alegría, decidió
unirse a
Teobaldo y al mago.
En la página cuarenta
pasaron al cuarto cuento. Allí conocieron un marciano que había perdido su
plato
volador y no podía
regresar a Marte. También el marciano se unió al grupo de Teobaldo.
Llegaron por fin a “El
canto de la princesa”.
- ¡Hay que encontrar la
cueva antes de que la princesa se transforme en pájaro! – dijo Teobaldo.
El marciano, Belisario,
que veía a través de las piedras, señaló cuál era la cueva.
En la página siguiente
se encontraron con el espantoso dragón. El león saltó sobre él y le mordió una
pata.
Teobaldo aprovechó para
meterse en la cueva.
Cuando el dragón, Rufo,
iba a atacar al león con las llamaradas de fuego que salían de su boca, el mago
usó su varita para
hacer llover: el fuego se apagó.
Teobaldo encontró a la
princesa Mirna en la cueva y la sacó de allí. Pero al salir, el dragón se lanzó
furioso
sobre Teobaldo.
Durante dos páginas el
dragón lo persiguió y hasta llegó a chamuscarle el pelo. De repente, al joven
se le
ocurrió un plan. Fingió estar vencido y dejó que las dos
cabezas del dragón lo rodearan dejándolo en el medio.
Así, cuando las dos
bocas de la bestia lo atacaron, Teobaldo saltó al costado y las dos cabezas se
enredaron.
El raptor de la
princesa fue apresado enseguida. Teobaldo, rojo de vergüenza, no se animó a
hablar con
Mirna por cuatro
páginas.
Teobaldo y Mirna se
casaron en la última página y comenzaron un largo viaje de bodas hacia el
primer
cuento, de donde el
joven mensajero había salido.
Para el dueño del libro
hubo cierta confusión al principio pero luego se entusiasmó más que nunca con
la
lectura porque cada
tanto los cuentos cambiaban: el león de un cuento pasaba a otro, el mago del
segundo se
hacía amigo del
marciano del cuarto, los que se habían casado en el quinto, aparecían en el
primero.
Él, de todas formas,
siguió prefiriendo “El canto de la princesa” que, encima, ahora, hasta tenía
final feliz.
1. Ordenando las ideas
a) Subrayá en el texto
con rojo los dos personajes principales. ¿Cómo reconociste su importancia?
………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………….
b. Teobaldo era un…
marciano león
mago mensajero
c. Teobaldo era una
persona de verdad. Justificá tu respuesta.
Verdadero. Falso.
d. El libro de cuentos
pertenecía a Teobaldo. Justificá tu respuesta.
Verdadero. Falso.
e) Uní con flechas cada cuento con su personaje.
Utilizá un color para cada flecha.
Cuento 1 León
Cuento 2 Marciano
Cuento 3 Princesa
Cuento 4 Mago
Cuento 5 Teobaldo
f. Teobaldo decide
dejar su cuento para…
unirse al circo del mago.
ir a conversar con los animales de la selva. ir a rescatar a la princesa.
ir a cazar a un dragón.
g. Teobaldo ………………..
vuelve a su cuento.
No. Sí.
h) Teobaldo rescata a…
el mago. el león.
la princesa. el
marciano.
2. Completá
el cuadro con por lo menos 4 palabras en cada columna.
SUSTANTIVOS PROPIOS (3)
SUSTANTIVOS
COMUNES
ADJETIVOS CALIFICATIVOS
Realizar actividades del libro "Leídos" páginas del 9 a 17
Ciencias Sociales
-Leer en el capítulo 6
del libro “Biciencias” las páginas 74,75,76,77,78 y 79
-Realizar las actividades
propuestas en cada tema (amarillo)